
Vol.6 No.2 (2022): Journal Scientific Investigar ISSN: 2588–0659
http://doi.revistamqr.com/V6_2_ART_27.pdf
Vol.6 - N° 02, 2022, pp.439-460 442
INTRODUCCIÓN
La definición de Pensamiento ha tenido varios puntos de vista durante los siglos XX y XXI,
a continuación, se presentan distintas definiciones contemporáneas y clásicas.
Desde una perspectiva eminentemente psicológica, el pensamiento es uno de los atributos
que diferencia a los seres humanos con otros seres vivos, el cual puede estar conducido por
diversas operaciones mentales, tales como: recordar, relacionar, observar, imaginar, entre
otras, estos se van desarrollando a medida avanza la edad y la relación con la sociedad y el
mundo.
Dentro del enfoque cognitivo, la definición de Piaget procura generar un sentido al equilibrio
que debe existir entre el individuo y el medio ambiente pues al formarse este de manera
armónica se crea una interrelación en procesos en donde se asimila y acomoda toda la
información desde la reflexión, generando esquemas cada vez más complejos en el desarrollo
del pensamiento.
Para la Real Academia Española, el pensamiento es la “acción y efecto de pensar, actividad
del pensar, conjunto de ideas propias de una persona, de una colectividad o de una época,
frase breve y de tino serio, que refleja una idea de carácter moral o doctrinal”.
Por otra parte, Heidegger (2005) señala que el pensamiento puede ser concebido con un
proceso en el cual “tan pronto como tomamos el camino del aprender, confesamos por ello
mismo que todavía no somos capaces de pensar”. Así y de acuerdo con este autor, se puede
deducir que el pensamiento es un proceso continuo de aprendizaje, dado que los individuos
se ven enfrentados diariamente al descubrimiento de nuevas experiencias.
Por otro lado, y en la presentación de sustentos teóricos desde la definición de pensamiento,
es clave señalar que este se construye a partir de un flujo de ideas, símbolos y asociaciones
dirigidas hacia un objetivo, y que se expresan a través del lenguaje (pensamiento discursivo
- verbal) o a través de la acción (pensamiento práctico). Flujo que ha sido movido por un
problema y que intenta conducir a conclusiones eficaces de relación a tal problema (Capponi
(2001)).
Lo anterior da cuenta de que existen más soluciones o ideas de las que un individuo forma y,
tanto estas, como las posibles que pudiese incorporar, conforman parte de su organización
personal.
También es importante diferenciar cuando se habla pensamiento y razonamiento. El concepto
de razonamiento de acuerdo a Gadino (2005) se vincula usualmente con el de pensamiento,
pero no se equipara con él. En efecto, si bien se concibe que razonar es pensar, también se
advierte que no siempre pensar implica razonar. El concepto de razonamiento se relaciona
con el pensamiento cognitivo y no con elementos de corte perceptivo ni emocional.
Por otro lado, es importante diferenciar, comprender y conocer el pensamiento para efectos
de tomar una decisión o reflexionar. Para esto, Ortega y Gasset (1997) propone una definición
que distingue entre creencias e idea, donde cada una lleva a diferentes tipos de conocimiento.
Así, creencia es un pensamiento arraigado, una certeza absoluta y no se pone en duda y se
utiliza con frecuencia. “Creencia es aquello con lo que contamos absolutamente, pensemos
en ello o no; idea es aquello con que no contamos, sino que elaboramos, construimos en vista
de una falla en nuestras creencias” (Ortega y Gasset (1997))
Se puede entonces considerar que el pensamiento es una secuencia de imágenes e ideas que
tiene un individuo, es decir, meditar, imaginar, razonar y reflexionar, de forma positiva o